Fuente: Ministerio de Salud
- Te sugerimos que tu alimentación este basada principalmente en alimentos sin procesar y mínimamente procesados.
- Volvé a la comida hecha en casa, moderá el consumo de los alimentos procesados y evitá el consumo de productos ultraprocesados.
- Te recomendamos tomar agua segura, por lo menos 8 vasos diarios y evitarel consumo de bebidas azucaradas (gaseosas, jugos y aguas saborizadas).
¿Qué información tenés que conocer para saber lo que consumís?
Casi todos los alimentos que consumimos en la actualidad, se procesan de alguna manera, ya sea para hacerlos más agradables o para ser preservados para su consumo posterior.
Si bien muchos tipos de procesamiento son necesarios, beneficiosos y no generan daño para la salud, existen muchos otros que la perjudican.
Para entender esto, se ha creado una clasificación que agrupa los alimentos según su grado de procesamiento:
- alimentos naturales frescos y mínimamente procesados,
- alimentos procesados,
- alimentos ultraprocesados,
Alimentos naturales / frescos
Son los obtenidos de plantas o de animales que no sufren ninguna alteración tras extraerse de la naturaleza.
Por ejemplo, frutas, verduras, carnes y huevos.
Se recomienda su consumo.
Alimentos mínimamente procesados
Son alimentos naturales que se han sometido a un procesamiento sin la adición de sodio/sal, azúcares, aceites, grasas ni otras sustancias;
Por ejemplo, frutas y verduras congeladas, o envasadas al vacío, cereales como trigo, salvado y arroz, legumbres secas, leche líquida o en polvo, entre otros.
Se recomienda su consumo.
Alimentos procesados
Son alimentos sometidos a diferentes procedimientos que incluyen métodos de cocción y de preparación y también fermentación no alcohólica; con el objetivo de aumentar la vida útil de los mismos o para modificar o mejorar sus cualidades sensoriales. La mayoría de los alimentos procesados tienen dos o tres ingredientes, y se reconocen como versiones modificadas de los alimentos del grupo anterior.
Por ejemplo productos enlatados como choclo, arvejas y atún; conservas como duraznos en lata, quesos; pan artesanal y otros productos de panificación como pastas y fideos, levaduras, yogures en general, aceites vegetales y azúcar, entre otros.
Su consumo debería ser moderado.
Alimentos ultraprocesados
Son productos obtenidos a partir de la combinación de ingredientes procesados con cantidades generalmente pequeñas de alimentos sin procesar o mínimamente procesados. Incluyen la adición de ingredientes industriales, aditivos y conservantes que incorporan exceso de grasas, azúcares y/o sodio/sal.
Suelen tener gustos muy marcados (exageradamente dulces o salados, por ejemplo) y en general, vienen listos para consumirse o para calentar y, por lo tanto, requieren poca o ninguna preparación culinaria.
Existe cada vez más evidencia en relación al carácter de dependencia de estos productos, lo cual explica el potencial que tienen para deteriorar los hábitos alimentarios desde la infancia.
La incorporación habitual de los productos ultraprocesados no ayuda a mejorar la calidad de la alimentación porque aportan baja o nula cantidad de vitaminas, minerales y fibra, con exceso de grasas, azúcares y/o sal.
Por ejemplo, bebidas azucaradas, galletitas dulces y saladas, amasados de pastelería, golosinas, productos de copetín, embutidos y chacinados, fiambres, carnes procesadas, helados, aderezos, entre otros.
Se recomienda limitar o evitar su consumo.